Usando ultrasonidos, los investigadores lograron abrir la barrera en áreas cerebrales específicas, permitiendo que los vectores virales, que se utilizan para transportar terapia génica, atravesaran la barrera en áreas relacionadas con el Parkinson en macacos y pacientes. Esto permitiría el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas de una manera no invasiva y segura, lo que abre la puerta a un gran potencial terapéutico. Los investigadores esperan iniciar ensayos clínicos en 2024.
pruebas adicionales y ensayos clínicos para demostrar su eficacia y seguridad en humanos, pero sin duda es un avance muy prometedor en la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas», añade Sánchez Ferro.
La enfermedad de Parkinson es una patología neurodegenerativa que afecta a más de 10 millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por la pérdida progresiva de neuronas dopaminérgicas en una región del cerebro llamada sustancia negra, lo que provoca temblor, rigidez y problemas de equilibrio y coordinación.
Actualmente, los tratamientos disponibles para el Parkinson se centran en aliviar los síntomas, pero no en frenar o revertir el avance de la enfermedad. La terapia génica, que consiste en modificar el ADN de las células para corregir las alteraciones que causan la enfermedad, se considera una de las opciones más prometedoras para tratar la causa subyacente de la enfermedad.
El descubrimiento de los investigadores españoles abre una nueva vía para aplicar la terapia génica en el cerebro de forma segura y no invasiva, lo que podría permitir tratamientos más efectivos y tempranos para el Parkinson y otras enfermedades neurodegenerativas.